Lorenzo Agustí Pons, Alcalde de Paterna por el Partido Popular, encarga el proyecto de diseño del Auditorio municipal a empresa con la que previamente había tenido relación profesional como consecuencia de su actividad como arquitecto. Queda acreditado en la sentencia que Agustí Pons, mediante un abuso de poder derivado de la posición de superioridad que proporciona el ejercicio de la función pública y su condición de alcalde, realiza una actuación arbitraria consistente en adjudicar a la empresa el proyecto de nuevo auditorio, en ausencia de expediente administrativo ajustado a la legalidad, sin que exista concurso público previo ni seguimiento de los trámites legalmente establecidos para este tipo de adjudicaciones. De hecho, queda probado en la sentencia que el encargo fue realizado de forma verbal por parte del alcalde en su despacho del consistorio.
